miércoles, 11 de julio de 2012

Elecciones 2012: conclusión

Terminaron por fin los tiempos de campañas poco inteligentes, con apariencia de ser de bajo presupuesto (pero que hicieron enriquecer a más de una agencia publicitaria) y hartantes (léase fastidiosas). Por fin tenemos ganador, bien o mal, por guapo o por ser el menos peor, por compra de votos o por decidia de la población para ir a votar. México tiene presidente, del PRI una vez más.

Realmente no me interesa quién haya ganado, aunque era mi última opción de los 4 candidatos, Enrique Peña Nieto gobernará por 6 años. Mi opinión, sincera y apolítica, es que el que pierde se calla y se pone a trabajar y a mejorar su vida y su entorno y el que ganó tiene un gran peso en la espalda que espero que sepa llevar.

Contaré brevemente qué sucedió: se declaró un porcentaje de diferencia entre EPN (Peña Nieto) y AMLO (López Obrador) en el que el primero tenía la delantera, el segundo no aceptó su derrota y sigue impugnando (palabra rebuscada para decir "reclamando de forma legal") para que se invalide la participación de EPN. Creo que López Obrador gobernará de manera alterna otros 6 años, seguirá haciendo el ridículo como el hombre necio que es y terminará cerrando calles de la Ciudad de México. Es decir, este pleito no terminará pronto.

En fin, que ya tenemos presidente electo, que a algunos les parece una tragedia, a otros se les hace digno de festejar. Lo que me queda muy claro (contrario al futuro de mi país) es que quienes hacen de esto una tragedia o no, son las personas, los habitantes de México. Nadie más puede tomar las riendas de nuestras vidas, ni un político ni un señor feudal... digo, patrón. No serán las empresas, ni el dinero, ni la política, ni los demás individuos los que definirán nuestro futuro, somos nosotros, cada persona tiene el poder de tomar el futuro del país en sus manos, pero a través del trabajo, honestidad, deseos de superación y sueños por cumplir.

Para mí llegó a su fin este proceso, ahora queda el proceso de dejar de lamentarse y ponerse a trabajar (o dejar de festejar y poner los pies en la Tierra). Espero que la decisión haya sido bien hecha y tomada concienzudamente, pero lo más importante, que no le dejemos a un solo humano el trabajo que debemos hacer todos, cada día y con entusiasmo, lejos de limitaciones partidistas. La paz y el trabajo lo hacemos nosotros, no los políticos, no sé por qué cuesta tanto entenderlo.

NOTA: Recuerden, soy muy apolítica y no suelo tomar partido en temas de política, religión y deportes.

Tenshi

No hay comentarios:

Publicar un comentario